¿Cómo se elabora una evaluación diagnostica?
¿Que es la evaluación diagnostica?
Según James (2017), “La evaluación formativa es el proceso de búsqueda e interpretación de evidencia por parte de estudiantes y docentes con el fin de identificar ‘dónde’ se encuentra el estudiante, ‘a dónde’ necesita ir y cuál es la mejor forma de hacerlo”.
En ese sentido, el éxito del proceso de enseñanza-aprendizaje se sostiene, en parte, en una evaluación continua de los logros, necesidades y condiciones de los estudiantes, desde que empieza dicho proceso. Por ello, el Ministerio de Educación les propone a los docentes que, como parte de las primeras actividades a realizar el presente año escolar 2021, realicen un proceso de evaluación diagnóstica del nivel de desarrollo de las competencias de los estudiantes, con especial énfasis en las competencias seleccionadas para la etapa de consolidación 2021.
¿Cómo realizar este proceso de evaluación?
• Identifique las competencias seleccionadas para la etapa de Consolidación de Aprendizajes 2021.
• Organice toda la información recopilada a la fecha, en relación a dichas competencias, en los siguientes documentos: portafolio del estudiante, carpeta de recuperación del estudiante (si la hubiera), evaluaciones finales del año escolar 2020 y calificaciones registradas en el SIAGIE.
• Analice dicha información y evalúe si le dan una base razonable para planificar situaciones significativas y actividades acordes a las necesidades de los estudiantes desde el inicio del año escolar 2021.
• En el caso de las
competencias seleccionadas para las cuales considere que no cuenta con
información suficiente, plantee una evaluación diagnóstica a partir de
situaciones significativas y criterios relevantes para el análisis de las
producciones de los estudiantes (los fascículos le muestran algunos ejemplos
asociados a las distintas áreas y niveles). El objetivo de este proceso de
evaluación diagnóstica es el de contar con la información más precisa que sea
posible a fin de que el acompañamiento a realizar en el aula (tanto en la
educación a distancia como en la presencial) parta de lo que el estudiante ya
domina y, más bien, lo ayude a desarrollar aquello para lo cual aún necesita
orientación y apoyo. Sin información clara, este proceso puede ser mucho más
lento y poco eficiente.